Entre una mañana con nubes
queriendo el sol salir
amaneciste tú mi querida Cartagena
con uno de los trasatlánticos
que piso tu puerto ayer
partiendo estaba de tan bello lugar,
que a medio día
hiciste un amago de querer llorar callendote tres tímidas lágrimas
finas en las Puertas de Murcia
más luego estando nos en el puerto observando
las regatas
de tus ojos volvieron a brotar
tres lágrimas
más grandes que las anteriores
más cuando estaba
recogiendo
la ropa que tenía a secar
volviste a querer llorar
más pasada una hora
cerca de las cuatro
ya no te pudiste contener
estallaste a sollozar
para así poder regar
el campo de tan bello lugar,
al llegar la hora del crepúsculo
se asomó el sol
entre las nubes formando
un firmamento
con tonos de amarillo
rojo ,naranja y azul
para alegrar el cielo
de plena felicidad
por poder lucir
entre las nubes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario